Con la llegada del 2023 se acabó el plazo para que los ayuntamientos con más de 50.000 habitantes pongan en marcha sus Zonas de Bajas Emisiones o ZBE. Así lo especifica la Ley de Cambio Climático y Transición Energética que se publicó en el BOE (Boletín Oficial del Estado) en mayo de 2021 y así lo concreta el Real Decreto que regula estas ZBE y que se aprobó ‘in extremis’ el pasado día 27 de diciembre. Esta normativa también afecta a los municipios de más de 20.000 habitantes con problemas específicos de contaminación. ¿Qué ciudades están preparadas? ¿A qué coches van afectar las ZBE 2023? ¿Habrá moratoria?… Aclaramos todas las dudas sobre las Zonas de Bajas Emisiones.
Los ayuntamientos con más de 50.000 habitantes tienen que poner en marcha sus Zonas de Bajas Emisiones o ZBE en enero de 2023
En total hay 149 ciudades afectadas que tienen que restringir el acceso de ciertos vehículos a los centros urbanos. El plazo acabó el 1 de enero de 2023 pero la realidad es que solo 20 están listas para poner en marcha estas ZBE. Sólo un 13% según un estudio realizado por el periódico El País. ¿Qué hay detrás de este bajo porcentaje? Analizamos las claves de las ZBE.
Por qué se han creado las ZBE
La Ley de Cambio Climático y Transición Energética responde al compromiso de España a nivel internacional y europeo para ayudar a la descarbonización, luchar contra el cambio climático y mejorar la eficiencia energética. El plan de medidas abarca hasta el año 2050 y entre ellas está la implantación de las ZBE.
¿Qué entiende esta ley por una Zona de Bajas Emisiones?
Concretamente dice: “el ámbito delimitado por una Administración pública, en ejercicio de sus competencias, dentro de su territorio, de carácter continuo, y en el que se aplican restricciones de acceso, circulación y estacionamiento de vehículos para mejorar la calidad del aire y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero, conforme a la clasificación de los vehículos por su nivel de emisiones de acuerdo con lo establecido en el Reglamento General de Vehículos vigente”.
Cómo reconocer una ZBE al volante
Las ZBE se señalizarán de forma clara en los puntos de acceso a la misma, y para ellos se utilizará la señal vertical aprobada en 2021 (instrucción MOV 21/3) que informa de manera más sencilla las restricciones a la circulación.
El Real Decreto de las ZBE especifica unos requisitos mínimos que tendrán que cumplir las ZBE a nivel nacional pero cada municipio podrá establecer sus propias restricciones según unos indicadores del nivel de contaminación, ruido… La previsión es que se utilice como criterio el sistema de etiquetas medioambientales de la DGT. Esta normativa también dice que los ayuntamientos tendrán que informar a los ciudadanos sobre su proyecto de ZBE al menos durante 30 días antes de ponerlo en marcha.
Por otro lado, la DGT está preparando una web donde poder consultar las restricciones de todas las ZBE que se pongan en marcha en España para poder consultar con antelación si nuestro vehículo tiene restricciones. Los municipios informarán a este organismo sobre los horarios si los hubiera y vehículos permitidos, según su etiqueta ambiental, en el plazo máximo de un mes desde su establecimiento. La DGT pondrá dicha información a disposición de navegadores, vehículos y resto de agentes del ecosistema de la movilidad a través del Punto de Acceso Nacional de Tráfico y Movilidad.
¿Cómo saber la etiqueta de mi coche?, ¿Dónde adquirirla?
Para saber qué etiqueta o distintivo ambiental le corresponde a tu coche solo tienes que acceder a este enlace de la DGT y añadir tu matrícula. En algunos casos se han producido errores administrativos asignando a algunos vehículos una etiqueta que no le corresponde. Esto se debe a que la DGT ha tenido en cuenta el año de matriculación y no la norma de homologación. Si es tu caso, te contamos cómo conseguir la etiqueta que te corresponde.
Puedes comprar la etiqueta en una oficina de Correos por cinco euros.
¿Hay que llevar la etiqueta visible? No es obligatorio según la DGT que sí lo recomienda pero algunas ciudades sí obligan a llevar la pegatina en el parabrisas, por ejemplo, Barcelona, Gijón y Madrid.
¿Qué ciudades están preparadas?
A día de hoy solo 20 ciudades han implantado o lo tienen todo listo para activar sus ZBE. Son Madrid, Barcelona, Pamplona, L’Hospitalet de Llobregat, Sant Cugat, Cornellà de Llobregat, Pontevedra, Sevilla, Córdoba, Burgos, Talavera de la Reina, Ciudad Real, Algeciras, San Cristóbal de la Laguna, Melilla y los municipios madrileños de Alcobendas, Coslada, Fuenlabrada, Parla y Rivas. En esta última localidad han activado una ZBE específica para proteger los entornos escolares.
Ramón Ledesma, asesor de Pons Mobility, cree que es previsible que se implanten medidas puntuales en todas las ciudades afectadas que justifiquen de algún modo que la ZBE ha comenzado. “Ahora bien, las grandes medidas de restricción no vendrán hasta después del verano en todos ellas, precisamente por el ciclo electoral”, matiza.
Ciudades con ZBE por ley
Estas son las ciudades con más de 50.000 habitantes que están obligadas a activar una ZBE en 2023:
• Andalucía: Alcalá de Guadaira, Algeciras, Almería, Benalmádena, Cádiz, Chiclana de la Frontera, Córdoba, Dos Hermanas, El Ejido, El Puerto de Santa María, Estepona, Fuengirola, Granada, Huelva, Jaén, Jerez de la Frontera, La Línea de la Concepción, Linares, Málaga, Marbella, Mijas, Motril, Roquetas de Mar, San Fernando, Sanlúcar de Barrameda, Sevilla, Torremolinos, Utrera, Vélez Málaga.
• Aragón: Huesca, Zaragoza.
• Asturias: Avilés, Gijón, Oviedo, Siero.
• Cantabria: Santander, Torrelavega.
• Castilla y León: Ávila, Burgos, León, Palencia, Ponferrada, Salamanca, Segovia, Valladolid, Zamora.
• Castilla La Mancha: Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Talavera de la Reina, Toledo.
• Cataluña: Badalona, Barcelona, Castelldefels, Cerdanyola del Vallès, Cornellà de Llobregat, El Prat de Llobregat, Lleida, Manresa, Mataró, Molet del Vallès, Reus, Rubí, Sabadell, Sant Boi de Llobregat, Sant Cugat del Vallès, Santa Coloma de Gramenet, Tarragona, Terrasa, Viladecans, Vilanova i la Geltrú.
• Comunidad de Madrid: Alcalá de Henares, Alcobendas, Alcorcón, Aranjuez, Arganda del Rey, Boadilla del Monte, Collado Villalba, Colmenar Viejo, Coslada, Fuenlabrada, Getafe, Leganés, Madrid, Majadahonda, Móstoles, Parla, Pinto, Pozuelo de Alarcón, Rivas Vaciamadrid, Las Rozas, San Sebastián de los Reyes, Torrejón de Ardoz, Valdemoro. La ciudad de Madrid se convertirá en la ZBE más grande de Europa en 2024.
• Comunidad Valenciana: Alicante, Alcoy, Benidorm, Castellón de la Plana, Elche, Elda, Gandía, Orihuela, Paterna, Sagunto, San Vicente del Raspeig, Torrent, Torrevieja, Valencia, Vila-real.
• Extremadura: Badajoz, Cáceres, Mérida.
• Galicia: A Coruña, Ferrol, Lugo, Ourense, Pontevedra, Santiago de Compostela, Vigo.
• Islas Baleares: Calvià, Ibiza, Palma de Mallorca
• Islas Canarias: Arona, Arrecife, Grandilla de Abona, Las Palmas de Gran Canaria, San Bartolomé de Tirajana, San Cristóbal de La Laguna, Santa Cruz de Tenerife, Santa Lucía de Tirajana, Telde.
• La Rioja: Logroño.
• Región de Murcia: Cartagena, Lorca, Molina de Segura, Murcia.
• Navarra: Pamplona.
• País Vasco: Baracaldo, Bilbao, Getxo, Irún, San Sebastián, Vitoria.
• Ceuta: Ceuta, Melilla.
¿A qué vehículos afectan?
Las prohibiciones o restricciones de acceso afectarán prioritariamente a los vehículos con más potencial contaminante y serán proporcionales a los objetivos de calidad del aire y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de cada municipio, «lo cual deberá estar suficientemente motivado», dice el Real Decreto.
También dice que cuando se permita el acceso de vehículos motorizados, se priorizará el acceso de los vehículos cero emisiones. «Únicamente, y en casos debidamente justificados, se podrán establecer excepciones a estas restricciones», se especifica.
Sin duda los vehículos más afectados por las ZBE van a ser los que no tienen etiqueta medioambiental (también conocidos como vehículos con etiqueta A). “Afectarán de forma directa a casi diez millones conductores propietarios de vehículos sin etiqueta (9.919.663) y que verán prohibido el acceso a determinadas municipios, así como duplicado el importe de multas por acceder a estas zonas tras la reforma de la ley de Trafico”, dicen desde la Fundación RACE.
También podrá afectar a casi 20 millones de vehículos con etiquetas B (9.414.030) y C (9.575.822), ya que no podrán aparcar en la calle (solo si es en un parking) dependiendo de las ciudades, “lo que supone acotar y poner precio a la libertad de movimiento de millones de conductores”, continúa explicando Nuria Alonso, portavoz de la Fundación RACE.
A pesar de la entrada en vigor de las ZBE obligatorias desde enero de 2023, tres de cada cuatro conductores no cambiarán de coche, según concluye una reciente encuesta realizada por coches.net.
Diferentes tipos de ZBE
Además de las ZBE permanentes, que son las que se van a tener que implantar a partir del 1 de enero de 2023, se mantendrán o podrían ampliarse las ZBE temporales, que son las que se ponen en marcha en días o períodos concretos cuando se produce un episodio de alta contaminación.
Además, el nuevo Real Decreto que regula a estas zonas de bajas emisiones, también considera la posibilidad de crear zonas de especial sensibilidad para proteger a población más vulnerable, incluida la población infantil. Estas zonas incluirán requisitos y medidas de reducción más exigentes que los de la ZBE principal y se garantizará, para estos ciudadanos más vulnerables, el acceso a las mismas con seguridad. Estas zonas de especial sensibilidad se establecerán prioritariamente en las proximidades de equipamientos escolares, sanitarios, hospitalarios y de residencias de ancianos. Es el caso del ayuntamiento de Rivas (Madrid) que ha creado una ZBE escolar.
Multas por incumplir la ZBE
Con la nueva Ley de Tráfico, desde marzo de 2022 incumplir las restricciones a una ZBE se considera una infracción grave y conlleva una multa de 200 euros (antes eran 90 euros) con posibilidad de reducir la cuota a la mitad por pronto pago. Los municipios, por lo general, controlan el acceso a través de lectores de matrículas.
La Fundación RACE pone sobre la mesa el hecho de ver cómo la etiqueta ambiental que la DGT creó en 2016 para clasificar los coches según su grado de contaminación ha hecho que “cerca de la mitad de la recaudación por multas de tráfico del Ayuntamiento de Madrid estén relacionadas con accesos no permitidos a las Zonas de Bajas Emisiones”. Solo en diciembre de 2021, el consistorio recaudó 2,6 millones de euros por las sanciones impuestas en Madrid Centro y hasta el mes de julio de 2022 la recaudación ascendió a 81,9 millones de euros, lo que supone el 42% del total de las multas de tráfico tramitadas en Madrid.
Moratoria para aplicar la ZBE
A pesar de las voces que piden una moratoria, entre ellas la de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el Gobierno se ha mostrado en contra.
Aún así, desde la Fundación RACE insisten en que una moratoria sería bien acogida por los conductores “ya que ayudaría no solo a la homogeneidad y aplicación de la normativa en las ciudades, sino también a ampliar el conocimiento de las medidas a aplicar. De esta forma, los ciudadanos solo perciben imposiciones y normativas acompañadas de cargas económicas que hacen que un vehículo se esté convirtiendo en un artículo de lujo para muchos conductores”, explica su portavoz, Nuria Alonso.
Desde el RACE se muestran a favor de las políticas que mejoren el medioambiente pero siempre que se lleven a cabo pensando en los ciudadanos y usuarios de la vía. “Lamentamos que la movilidad siga asociándose a un problema de salud pública, y que se tomen decisiones que perjudiquen a los conductores no residentes de las ZBE, estableciendo restricciones excesivamente severas a la movilidad del vehículo particular. La Administración delega la responsabilidad directa al usuario sobre este problema, y no contempla planes preventivos, ni soluciones alternativas”, afirman.
Algunas soluciones aporta AEDIVE, la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica. Su director, Arturo Pérez de Lucía, cree que “los ayuntamientos deben acelerar la adopción de soluciones que permitan, mediante el transporte público y la movilidad compartida de vehículos eléctricos de dos y cuatro ruedas, ofrecer alternativas viables y asequibles para garantizar esa movilidad”.
Para la consultora Pons Mobility, ajustar la Ley a la realidad siempre es lo más deseable y creíble aunque no consideran que sea suficientemente necesario establecer una moratoria. “Sí sería conveniente que en el próximo mandato legislativo (tanto nacional como local) empezasen a adoptarse medidas de evaluación y consecuencias derivadas de la implantación de la ZBE. Para bien y para mal. No puede ser lo mismo aquellos municipios que ‘gobiernan’ la movilidad hacia un modelo más razonable y sostenible que aquellos que no adoptan decisiones”, explica su asesor Ramón Ledesma, ex Subdirector General de Normativa y Recursos de la DGT. Para ayudar a los ayuntamientos, Pons Mobility ha publicado el primer decálogo para la gobernanza eficiente de las ZBE.
De momento, solo Barcelona ha anunciado una normativa para reducir las restricciones a los conductores con rentas más bajas y Madrid ha aprobado una moratoria para los vehículos ligeros de mercancías con etiqueta B para que puedan circular por la Zona de Especial Protección de Distrito Centro hasta el 31 de diciembre de 2023.
Y es el hecho de que el 2023 es año electoral una de las razones de que pocas ciudades estén preparadas para tener una ZBE. “Es de manual de políticas públicas que las restricciones son complicadas de implementar seis meses antes de un proceso electoral. Lo lógico y razonables es hacerlo cuando empieza el ciclo. Por ello, es probable que el desarrollo de estas ZBE se produzca con más intensidad a la vuelta del verano”, explica el asesor de Pons Mobility. Además, explica, que otra de las razones está en que hay cierta inseguridad jurídica: “No existe una fórmula matemática para la implementación de la ZBE. Solo ciertas recomendaciones. Sin embargo, estamos hablando de “restricciones” de los derechos de los ciudadanos. Y esto, queramos o no, exige una fuerza normativa clara y sólida”.
Recientemente Pere Navarro, director de la DGT, afirmaba que desde este organismo han elaborado un protocolo que ayude a los ayuntamientos a incorporar un sistema para la lectura automática de matrículas, así como una serie de recomendaciones sobre aquellas actividades económicas que deberían tenerse en cuenta a la hora de poder circular por una ZBE.
Desde Aneval, la asociación que representa a más de la mitad del mercado del rent a car o coches de alquiler, también piden a los ayuntamientos que las normas de las ZBE sean claras y se publiquen con cierta antelación. También solicitan que la plataforma en la que está trabajando la DGT para consultar las ordenanzas municipales se ponga en marcha lo antes posible. Algo que, sin duda, ayudaría mucho a los conductores a moverse por las ciudades españolas con restricciones a la circulación.
Artículo extraído de:
Coches.net